Rosa de Jericó Mediana. Tamaño en seco aproximado 4-6Cm de diámetro. Se presenta embolsada con el cartón de la imagen o similar. Cuando la planta revive se abre y se hace mucho mas grande
La Rosa de Jericó es, en realidad, un helecho. Tiene la particularidad de poder presentarse en dos estados completamente diferentes: hecha una bolita, pareciendo un simple matojo mustio, cuando las circunstancias son desfavorables; o con los esporangios extendidos y de un color verde vivo, cuando encuentra suficiente humedad a su alrededor. La alternancia entre estas dos fases puede realizarlas en inmumerables ocasiones durante más de 20 años.
Los ocultistas de todos los tiempos han sabido que esta es una planta sacra y una de las más mágicas de nuestro mundo. Durante milenios ha sido utilizada por chamanes y brujos por sus reputadas propiedades mágicas, y más tarde se ganó un lugar en los laboratorios de los alquimistas. La Rosa de Jericó absorbe y se alimenta de todo tipo de energías del lugar donde se encuentra, especialmente de las negativas, transformándolas en positivas. También se la conoce con el nombre de doradilla o planta de la resurrección.
Entre los usos mágicos que le han dado las distintas culturas, destacan la propiedad de bendecir y proteger casas y atraer la suerte, el dinero y la fortuna a los negocios. Los practicantes del vudú también la utilizan para atraer dinero y amor. Pero los beneficios de este auténtico talismán viviente no acaban aquí: los que decidan poner una Rosa de Jericó en su vida y trabajen con ella, experimentarán mejoras en su salud, vida en pareja o matrimonial, exámenes, en el trabajo, los negocios, la prosperidad económica o en la suerte de sus vástagos.